Supongo que es así, y le quiero echar la culpa al destino porque no creo
en las casualidades, porque tanto tiempo y tantas cosas no pudieron haber
surgido de la nada, así como así sin estar premeditas, prescritas,
predestinadas; tantos mundos, tantas épocas, tantas personas, tantas
posibilidades, tantas ocasiones diferentes y coincidir contigo sin razón
alguna, no. Además de que lo sentí, entre tu boca
escuche esos cantos del viento que me susurraron que aquello tenía un
propósito, y que era un regalo y una bendición, y que era eterno, que un «te
amo» es suficiente y que eras justo para mí.
También supongo que tendré que vivir con los ojos tan anegados de recuerdos siempre, que cada que me ría y cada que escuche una canción vas a estar detrás de mis parpados brillando e incluso burlándote «hola, fui tuyo, fuimos uno y nos rompimos y jamás me olvidarás» y el destino «te lo di para luego quitártelo, te hice amarlo tanto hasta quedarte seca y luego arrebatártelo, las almas gemelas no pueden estar juntas para siempre, deben reaccionar como moléculas químicas, robarse sus átomos, cederlos, hurtarlos, volverlos a dar y entonces deben explotar y eferveser y morir. Porque de alguna manera son iguales, de alguna forma son espejos, y una persona no puede estar para siempre frente a sí misma viendo su reflejo, por más que quiera, por más que te estés rompiendo en pedazos, por más que te estés ahogando en tus propias lágrimas y sientas morirte de mil formas, sientas la sangre impregnada de memorias llenarte la piel, por más que digas «no, yo sí, yo sí» es algo que es inevitable».
También supongo que tendré que vivir con los ojos tan anegados de recuerdos siempre, que cada que me ría y cada que escuche una canción vas a estar detrás de mis parpados brillando e incluso burlándote «hola, fui tuyo, fuimos uno y nos rompimos y jamás me olvidarás» y el destino «te lo di para luego quitártelo, te hice amarlo tanto hasta quedarte seca y luego arrebatártelo, las almas gemelas no pueden estar juntas para siempre, deben reaccionar como moléculas químicas, robarse sus átomos, cederlos, hurtarlos, volverlos a dar y entonces deben explotar y eferveser y morir. Porque de alguna manera son iguales, de alguna forma son espejos, y una persona no puede estar para siempre frente a sí misma viendo su reflejo, por más que quiera, por más que te estés rompiendo en pedazos, por más que te estés ahogando en tus propias lágrimas y sientas morirte de mil formas, sientas la sangre impregnada de memorias llenarte la piel, por más que digas «no, yo sí, yo sí» es algo que es inevitable».
Y supongo que siempre te estaré esperando, que
nunca te voy a olvidar, que siempre serás esa gran parte de mí y que de alguna
manera voy a aprender a vivir con el dolor, a retener las lágrimas, a fingir
sonrisas que todos creerán menos yo.
Te nomine para un Liebster Award, hermosa. En mi wordpress estan las cosas esas que debes hacer :) love you!
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